¿Cómo salir del bloqueo mental?

Entra tanta información que hemos visto en los últimos 2 posts podemos identificar si estamos experimentando un bloqueo mental, ya sea si lo experimentan como atletas o lo ven en alguno de sus compañeros o como entrenador en alguno de sus atletas, pero aun queda la gran pregunta ¿cómo salir del bloqueo mental?

Sonará muy cliché en la psicología pero les prometo que es una gran verdad, el primer paso es aceptar el problema, lo cual no es fácil y es que tendemos a analizar primero otras cosas del deporte como, el entrenamiento o la noche anterior pero se nos hace difícil llegar a la conclusión que es algo mental y esto, quizás sea porque no es algo que yo puedo enseñar físicamente a los demás porque es algo dentro de nosotros que esta bloqueado. 

Parte del proceso de aceptar es identificar el porque tenemos este problema y es aquí donde entra el papel del psicólogo deportivo. Como mencioné antes, un bloqueo mental no es algo que yo pueda señalar y enseñar donde esta exactamente el problema y por eso se necesita de un profesional que les permita a ustedes llegar al causante del problema, ya que es un proceso inconsciente que debe ser traído a lo consciente, y poder trabajar con ello. Las posibles causas las vimos en el post pasado pero puede ser mas de una causa o la acumulación de eventos, por eso deben de ir con un psicólogo deportivo. 

Una vez identificado el trauma que ocasiona este bloqueo el psicólogo deportivo realiza un plan estratégico que incluye la visualización, el uso de programación neurolingüística, ejercicios de concentración, respiración, autohabla o muchas otras técnicas. Ojo, no se utilizan todas estas, se utilizan las que el psicólogo considere estratégicas tomando en cuenta todos los factores individuales del atleta como deporte, edad y el causante del bloqueo mental. Lo que hacen todas estas técnicas es re-entrenar al cerebro a responder a esta situaciones que causan el bloqueo. 

En resumen, el bloqueo mental ocurre por un trauma y que se lleva al inconsciente, lo podemos vivir por muchos años y aprender a adaptarnos a ellos pero no es la mejor solución ya que eventualmente se nos hará mas difícil realizar los movimientos o habilidades que conscientemente sabemos que podemos hacer pero para salir de este problema debemos ser conscientes de ellos y por eso lo primero es identificarlo con ayuda de un profesional especializado como el psicólogo deportivo que es alguien que sabe como ayudarles a enfrentar estos bloqueos. Dicho esto, debo dejar en claro que la mejora no es de un día para el otro y que esto es un proceso que necesita el tiempo suficiente de recuperación, es como una lesión que tenemos que darle su tiempo para sanar. Busquen un psicólogo deportivo que los guié y los apoye en todo el proceso y confíen en el proceso, todas estas técnicas funcionan pero necesitan un trabajo duro. 

¿Por qué ocurre el bloqueo mental?

En el post pasado vimos lo que es el bloqueo mental y como afecta a los atletas ese momento en el que sienten que no pueden hacer los movimientos que llevan meses entrenando.  Ahora discutiremos por qué ocurre el bloqueo mental.

Ya sabemos que el bloqueo mental es cuando un atleta se congela al hacer un movimiento o una acción que anteriormente ha dominado, un tiro libre que un futbolista ha practicado muchas veces, una rutina de una gimnasta, un paso de una bailarina. Esta de más describir lo frustrante que puede ser para el atleta y su entorno cuando ocurren y más en momentos importantes de la competencia. 

Antes que nada se debe entender que el crecimiento de los atletas no solo debe ser físico o deportivo pero también mental y se denota en estos episodios, por muy preparado que se este en lo técnico o táctico, si no existe un control mental de nada sirve tanta preparación. Lo interesante de todo es que parte del control mental que se debe de tener es el dejarse llevar y confiar en lo entrenado.

Dicho lo anterior vámonos al punto, ¿por qué ocurre un bloqueo mental? para empezar debo decirles que no hay una razón en específico pues esto pasa por varias situaciones que dependen de diferentes factores y cada caso es muy particular pero en general se da por un trauma vivido por el atleta como una lesión, una situación que causó miedo como casi caerse y lastimarse seriamente o ver a otro atleta sufrir una lesión grave, o puede ocurrir a medida que pasa el tiempo por una cuestión específica, usualmente creencias inconscientes como por ejemplo, miedo al fracaso, miedo de decepcionar a los demás, falta de autoconfianza en las propias habilidades o incluso en el cuerpo técnico y, aunque parezca raro,  el miedo al éxito puede ser un causante. 

Ahora, para entender más en detalle que es lo que pasa con nosotros tengo que contarles un poco de como funciona nuestro cerebro, aguantenme un rato en lo que lo explico. 

En respuesta a estos traumas o creencias inconscientes nuestros cerebros desarrollan respuestas de miedo que se relacionan o conectan a un movimiento o una habilidad en particular en el deporte. Por un lado tenemos en nuestro cerebro una parte que da respuestas emocionales y rápidas, como cuando nos asustan y gritamos o cuando nos golpeamos y lloramos, pues, es esta parte la que se activa en situaciones de miedo y cuando pasa esto nuestro inconsciente asocia o conecta cualquier situación que se vea, que se oiga e incluso que se sienta como una situación de peligro, un trauma o miedo con un movimiento o una habilidad. Es como la alarma de nuestro cuerpo que al ver o sentir una amenaza se activa y da una respuesta de miedo y que nos pone en modo de supervivencia. 

Por otro lado tenemos la parte lógica y de respuesta lenta, la que utilizamos para resolver un problema de matemáticas y que también es la que sabe que el atleta puede realizar su movimiento o habilidad y que nada podría detenerlo pero cuando la parte emocional y rápida se activa bloquea a la parte lenta y lógica por cuestión de supervivencia, por la necesidad de reaccionar a algo que nuestro cerebro percibe como una amenaza. Nuestro cuerpo entra en ese momento en una modalidad o de pelea o de huida o de congelarse y en ese momento el desempeño se ve comprometido y en algunos casos, el atleta no puede desempeñarse como debe. El problema es cuando no se resuelve a corto plazo porque a medida pasa el tiempo esto pasa seguido y se convierte ya en una respuesta aprendida de nuestro cuerpo aunque las creencias que lo hayan causado hayan cambiado. 

Para dar un ejemplo de esto miremos un caso. Tenemos a una chica que es gimnasta y esta esperando su turno para competir, ella se siente segura, repasa mentalmente sus movimientos, ha practicado y sabe que lo puede hacer(la parte lógica y lenta de nuestro cerebro). Ha llegado el momento de entrar en el colchón, sube y empieza a hacer su rutina pero al momento de hacer un movimiento no puede hacerlo (la parte rápida y emocional de nuestro cerebro) y se queda parada sin saber que hacer unos segundos(El cerebro entra en su trilema de huir, congelarse o pelear), sigue su rutina con lo que recuerda pero ya no es lo mismo, ella ya no se siente segura. Baja del colchón y cuando le preguntan qué fue lo que paso ella simplemente responde con un "no se, no pude hacerlo", Esta chica unos meses antes vio a una de sus compañeras lesionarse al hacer el movimiento que ella tenia que hacer y en el momento de importancia que ella lo tenia que hacer su cerebro actuó. Al practicarlo ella lo hacia pero nunca expresó que le daba miedo hacerlo y lo fue guardando sin darle la importancia que debía.

A veces los traumas pasan a otros donde estuvimos presentes o a nosotros, pasan unos minutos antes de la competencia o meses antes. Son situaciones que no podemos evitar pero que debemos prestarles la atención y trabajar para eliminarlos. No es una situación que se elimina de un día para el otro, recuerden que la psicología no es un bombero que llega a apagar un fuego. en cuanto a cómo superarlos, eso se los paso en otro post. Espero que este haya sido muy informativo.